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Respuesta a la adivinanza del mes de agosto: Vainas
07
Sep
2022

Respuesta a la adivinanza del mes de agosto: Vainas

Este mes os invitamos a preparar la receta de ensalada de vainas y bonito

La temática elegida para el calendario de 2022 son los alimentos de temporada locales que aportan beneficios a nuestra salud y bienestar y para nuestro entorno.

 

Si consumimos alimentos de temporada apoyamos:

  • los modelos productivos de nuestros baserritarras
  • una comercialización más sostenible, ya que se malgasta menos energía en su distribución
  • un menor empobrecimiento del suelo. A al respetar los ciclos naturales de las plantas se fomenta la rotación de cultivos y se produce un menor empobrecimiento del suelo

 

En definitiva, al ser cultivados de forma natural, conservan sus aportes nutricionales; hablamos de vitaminas, minerales y otros nutrientes. Adicionalmente a esto, tienen una textura, una apariencia y un sabor más adecuado. Los alimentos de temporada son de mayor calidad en su época de recolección.

 

¿Cuál es la hortaliza elegida para el mes de julio? Las vainas

 

Proceden del continente americano y se incorporan a la alimentación europea en el siglo XVI.

 

La vaina se considera una verdura cuando hablamos de judía verde y una legumbre cuando nos referimos a la judía seca.

 

Es el fruto de una planta trepadora de la familia de las fabáceas. Tiene forma aplanada o redonda, es alargada, de color verde y contiene semillas en su interior.

 

Podemos encontrar vainas en el mercado durante todo el año, por ser una planta cultivada en invernaderos, aunque lo más recomendable es comer vainas de temporada en los meses de verano.

 

Dependiendo del grado de madurez de la vaina le salen unas hebras fibrosas en los extremos, que se deben quitar antes de la cocción.

 

Su consumo es apropiado en dietas de control de peso, porque tienen un bajo contenido calórico (31 kcal por cada 100 gramos), alto contenido en agua, minerales o fibra, bajos niveles de lípidos y no tiene colesterol, ni grasas, por lo que tienen acción reguladora y antioxidante.

 

Son ricas en vitamina A y C, que junto al zinc que contienen se encargan de mantener nuestro sistema inmunológico en un nivel óptimo. Su alto contenido en fibra regulariza el tránsito intestinal, combate el estreñimiento y ayuda a mantenernos saciadas.

 

También son buenas para la memoria, porque contienen vitamina B1 y Su alta concentración en vitamina K nos mantiene los huesos fuertes y sanos.

 

Su elevado contenido en potasio y magnesio ayudan a reducir la hipertensión.

 

También contienen una gran cantidad de ácido fólico, que favorece el desarrollo del feto, por lo que es un alimento muy interesante durante el período de embarazo y posterior lactancia.

 

No es recomendable consumirlas crudas, ya que además de ser indigestas, poseen una sustancia tóxica denominada faseolina que se elimina durante la cocción.

 

En el siguiente enlace puede accederse a un cartel informativo de ELIKA-Fundación Vasca para la Seguridad Agroalimentaria y una receta para ensalada de vainas y bonito.

 

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